¿Habéis leído él 'Don Quijote',lectores míos? " -preguntaba el gran escritor Giosué Carducci, en uno de sus ensayos- y aconsejaba : -"Seguramente que sí: en caso contrario, tirad en seguida este libro mío y poneos a leer aquél".

Parafraseando a Carducci, el autor de este trabajo desearía preguntar al lector, si alguno llegara a merecer, si ha visitado estas tierras de la Mancha, que son las de Don Quijote; porque si no lo ha hecho todavía, debe hacerlo sin demora, teniendo en cuenta la objetividad del consejo, ya que este modesto autor no es precisamente un manchego, sino catalán-barcelonés amante de la región manchega y de cuanto ella ofrece y encierra.

Sirva este pequeño trabajo como sencillo homenaje de reconocimiento a Don Miguel, por haber permitido a este modesto escritor valerse de su Obra magnífica -como de un cicerone- para empezar a descubrir la Mancha, no menos magnífica; y por los elogios que en aquella Obra quiso dedicar a la Ciudad Condal, a pesar de que nuestro héroe había de encontrar en ella su -muy discutible- derrota.